El sábado comprobé que se puede tomar una botella de Gancia sin ponerse en pedo. Ok, sin ponerse MUY en pedo sería más correcto, pero se puede.
También comprobé que se puede hacer una fiesta bastante copada en un 2 ambientes. Los 2 ambientes eran el comedor y el balcón, porque donde estábamos bailando nosotras el resto se iba al balcón. Se ve que no somos el alma de la fiesta porque nos esquivaban a más no poder.
Pero no importa porque yo tenía la orden de ponerle onda (sí, soy tan antipática que hay que avisarme con tiempo para que me haga la idea) y se la puse.
Le puse tanta, pero tanta, onda que hasta discutí con una amiga del anfitrión. Va, ella sintió que discutíamos y se lo conto a todo el mundo, a mí me chupó un huevo.
Situación, ella –vamos a decirle la negra- está sentada en el sillón con un café y su amiga –supongamos la puta. Me siento yo con un café y me señala al grito de “Nos criticaron pero ahora todos toman café”, entonces amablemente le explico que yo no la critique en ningún momento. La negra me dice “No sé porque te haces cargo”. Me está jodiendo? Me lo pregunta cuando apoyo el culo en el sillón con un café, mientras me señala con su dedo y no sabe porque me hago cargo? Cuando le expongo todo lo antedicho se rie y acusa no haberlo dicho por mi. Mientras la puta se sonreía como si algo gracioso estuviese pasando. Dos boludas y les juro que esas eran las dos mas normales que habia en esa casa. Sin contarme a mi, obvio.
Listo, la noche se cayo a pedazos, nos fuimos a casita yo rezando para no tener resaca al dia siguiente, insisto una botella es como mucho y todos felices.
Otra cosa que comprobé es que no puedo estar despierta hasta las 6 de la mañana. El domingo estuve todo el maldito dia en la cama.
Soy el alma de la fiesta o no?
